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martes, 17 de junio de 2014

Fabricación de un casco con chapa

Este proyecto comienza un día de huelga en el cual éramos pocos en clase y el profesor nos sugirió a un compañero y a mi construir un casco plegando chapa. El proceso iba a ser de manera que íbamos a construir dos mitades simétricas y después remacharlas en el centro, a la altura del eje de simetría de la cabeza.
Lo primero que realizamos fue un molde de papel de nuestra cabeza, ya que el papel nos sirve de  ejemplo para saber los pliegues que debemos realizar en la chapa.
 Una vez que sabemos como se pliega el papel sobre nuestra cabeza podemos recortar el molde que nos ha salido para calcarlo sobre la placa de acero que vamos a utilizar.
Este molde es de una mitad, por lo tanto todo lo que hagamos hay que hacerlo por duplicado para conseguir el casco completo.
Aquí estamos calcando el molde de papel sobre la chapa de acero, pero sobredimensionando la superficie sobre la que vamos a trabajar para preveer todo el material que debemos plegar.
Tras marcar a pieza debemos recortarla.
Una vez que tenemos las piezas recortadas debemos empezar a trabajar el metal hasta conseguir la forma deseada. Nótese que la zona recta sería la que iría remachada y el pico que se aprecia debe caer hasta la altura de la oreja.
Para conseguir dar al metal la forma que queeremos trabajamos mayoritariamente con dos herramientas: la rueda inglesa y la recogedora de metal.

 Tras hacer pasar a la pieza por la rueda inglesa, poco a poco vamos consiguiendo que se curve, como se aprecia en la foto
 Una vez tenemos una primera curva tenemos que conseguir doblar la pieza hacia dentro. Para esto utilizamos la recogedora de chapa, que pellizcando a la chapa consigue recogerla y hacerla doblarse.
Después de muchos recogidos conseguimos este aspecto

El problema del recogido es que hacemos que la pieza gane grosor, de modo que para aplanarla la hacemos pasar por el martillo neumático.
Una vez aplanada la pieza proseguimos con el proceso de rueda inglesa y recogedora de chapa. El problema que aparece es que cuando doblamos en un sentido con la rueda inglesa lo perdemos en el otro, y debemos volver a recoger la chapa, lo cual vuelve a estirar la chapa por el otro lado...
Como alternativa el profesor nos propuso otra forma de trabajar el metal, como complemento a lo que estábamos haciendo. Debíamos provocar un estiramiento en una zona concreta de la pieza golpeándola con un martillo de nylon sobre un cojín de serrín para no dañar la pieza.
El proceso funcionaba, pero quedaban muchos agujeros marcados en la chapa, de modo que para homogeneizar la pieza debíamos pasarla por la rueda inglesa y el martillo neumático de nuevo, lo cual volvía a estirar la pieza en el sentido que no queríamos.
Este proyecto ha quedado inacabado, ya que nos iba a llevar más tiempo del que creimos en un principio y, dado que se estaba acabando el curso pasamos a hacer un nuevo proyecto.

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